Actuar, cantar y bailar. Para participar en un musical no solo hace falta saber interpretar a un personaje, sino que hay que cantar medianamente bien y poder seguir una coreografía. Por eso mismo no he participado en ninguno. Empezaría a cantar y no quedaría nadie al terminar la canción.
Aunque no haya salido al escenario para participar en ningún musical me considero una enamorada de estos. Los primeros musicales que vi fueron los típicos musicales de instituto donde los alumnos salen y hacen una versión de algún musical conocido. Estos ya me gustaban, pero el amor por este espectáculo me llego un viernes de hace dos años. Mis tíos habían conseguido entradas para el musical de "Los Miserables" y nos preguntaron si queríamos ir.
En ese momento me dí cuenta de la dificultad de crear un musical. No solo consiste en cantar bien y bailar decentemente, si no que mediante su actuación tienen que transmitir sentimientos. Tienen que conseguir que el publico se encuentre tan triste como para llorar como un bebe, que se ría hasta caerse al suelo, o que tenga tanto miedo como para agarrarse al asiento. A partir de aquel día nació mi interés por ellos.
Aunque me gusten mucho, desgraciadamente no he tenido la oportunidad de ver todos los que me gustaría. Solo he podido acudir al mencionado anteriormente y al de "Hoy no me puedo levantar" aprovechando una pequeña estancia en Madrid.
A pesar de haber asistido tan solo a dos musicales me considero una apasionada de estos y espero poder acudir a más en un futuro.
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